Reseña histórica
Más de 60 años al servicio de la sociedad y la ciencia
La fundación de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), en su condición de primera institución de educación superior de carácter privado, representa un importante aporte de la Conferencia del Episcopado Dominicano a la sociedad dominicana, conformada en ese entonces por: Mons. Octavio Antonio Beras Rojas, Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo; Mons. Francisco Panal Ramírez, Obispo de La Vega; Mons. Juan Félix Pepén Solimán, Obispo de la Altagracia, Higüey; Mons. Tomás Francisco O’Reilly, Prelado de San Juan de la Maguana, y su principal ideólogo, Mons. Hugo Eduardo Polanco Brito, Obispo de Santiago de los Caballeros.
En el momento histórico que surgió la Universidad, se daban los primeros pasos hacia una sociedad democrática, luego de más de tres décadas de la dictadura de Trujillo. La fundación de la Universidad fue respaldada por el Episcopado Dominicano y por distinguidos santiaguenses, quienes efectuaron las primeras contribuciones para su pronto establecimiento. El 9 de septiembre de 1962 se hizo de público conocimiento la erección de la Universidad, dominándola “Madre y Maestra” en homenaje a la gran encíclica social de Su Santidad Juan XXIII. Al erigirse, Monseñor Polanco Brito empezó a efectuar los pasos para su organización académica.
El 15 de noviembre de 1962 se iniciaron las labores de la PUCMM en una residencia alquilada en la calle Máximo Gómez, esquina Sully Bonnelly, del centro de la ciudad. Un total de 15 profesores, todos por asignatura, y 60 estudiantes formaron los núcleos de las primeras facultades establecidas, que fueron las de Derecho, Educación y Filosofía.
Como parte de los más significativos aportes que ha hecho la Universidad a la sociedad dominicana se pueden señalar:
- Ser espacio para el diálogo abierto y la concertación entre los diferentes sectores sociales del país, con miras a establecer acuerdos sobre la agenda nacional y encontrar soluciones pacíficas a los problemas prioritarios.
- Contribuir al mejoramiento de la educación dominicana, a través de:
- La formación de maestros en servicio y de nuevos prospectos.
- El desarrollo de proyectos de investigación-acción que contribuyen a la mejora de la práctica docente y de las competencias cognitivas de los estudiantes.
- La realización de investigaciones en las áreas de Ciencias Básicas, especialmente en Física y Matemática, aportando nuevos conocimientos a las mismas, así como en otras áreas.
- La promoción del desarrollo de la lectura y la escritura en los primeros niveles de formación, entre otras iniciativas.
- La implementación de un programa de asistencia económica exitoso, el cual ha permitido acceder a una educación de calidad a estudiantes talentosos, pero que carecen de los recursos económicos.
- El desarrollo de programas de servicio comunitario para la educación y prevención de los problemas sociales, medioambientales y de salud, en las zonas más desfavorecidas y con mayores riesgos.
- El haber sido pionera en la oferta de programas de estudio innovadores, en respuesta a las necesidades de desarrollo del país, a través de una formación integral, promoviendo en sus estudiantes valores cristianos y principios éticos y morales, así como desarrollando sus potencialidades artísticas y capacidad de liderazgo. Las carreras en las que la Universidad fue precursora son:
- Administración de Empresas
- Administración Hotelera
- Administración Pública
- Enfermería
- Geología e Ingeniería de Minas
- Ingeniería Electromecánica
- Ingeniería Electrónica
- Ingeniería Telemática
- Ingeniería Industrial
- Ingeniería de Sistemas y Computación
- Tecnología en Ingeniería
- Trabajo Social
- El establecimiento, desde sus orígenes, de relaciones internacionales con destacadas instituciones educativas y organismos financieros, lo que ha permitido no sólo el reconocimiento del país, sino que ha posibilitado que los profesionales tengan acceso a oportunidades laborales y de estudio en el extranjero.
Recuento de principales acontecimientos institucionales